El objetivo del proyecto era desarrollar un sistema de la evaluación del grado de tostado y la capacidad de cesión de compuestos aromáticos de barricas. Para ser más exactos, desarrollar un sistema de medida, llamado nariz electrónica, que permitiera detectar compuestos mensurables para escoger el tipo de barrica más adecuado a cada vino.
«Después de cuatro años de esfuerzo, análisis y medición de los indicadores precisos, desarrollamos un sistema preciso de evaluación del tostado, aunque el desarrollo de la nariz electrónica quedó paralizado por detectar demasiadas indiferencias».